La circuncisión suele realizarse por razones religiosas, culturales, higiénicas, estéticas o médicas. Se trata de una intervención que se ha llevado a cabo en todo tipo de culturas a lo largo de toda la historia.
Las posibles indicaciones médicas que pueden tratarse con la circuncisión incluyen un prepucio tenso (fimosis), parafimosis, enfermedades inflamatorias crónicas del glande y el prepucio (balanitis) como la balanitis de Zoon (balanitis circumscripta plasmacellularis) o el carcinoma. En general, se trata de una intervención con bajo riesgo y que puede presentar muchos beneficios para los pacientes indicados.